
Recuperar la cuenca
En julio próximo se cumplirán siete años desde que la Corte Suprema de Justicia ordenara, en el histórico fallo conocido como "Mendoza", la limpieza de la cuenca del Matanza Riachuelo, que recorre 64 kilómetros entre el partido de Cañuelas y el barrio porteño de La Boca. Cuando el proceso iniciado en 2008 concluya, en aproximadamente cinco años, unos 5 millones de habitantes de la Ciudad de Buenos Aires y de otros 13 distritos bonaerenses habrán sido beneficiados, directa o indirectamente, por el plan de recuperación de la cuenca, el primero que se lleva adelante en forma sistemática luego de más de 200 años de contaminación y abandono.
En estos casi siete años fueron extraídos del agua unos 20 mil camiones de basura (cerca de 200 mil toneladas), 70 embarcaciones hundidas o abandonadas fueron retiradas del cauce y un millón y medio de habitantes incorporados a la red de agua potable.
Los números se desprenden del plan que lleva adelante la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), el organismo tripartido creado en 2006 e integrado por representantes de la Nación, la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires responsable de llevar adelante las tareas de saneamiento.
Esas tareas comprenden desde la limpieza de los basurales a cielo abierto hasta la relocalización de habitantes ribereños, además de la realización de obras de agua potable y cloacas y el control de vuelcos industriales, entre otras.

El Juez Federal de Morón, Jorge Rodríguez

Jorge Rodríguez
Juez Federal de Morón.
Juez Rodríguez
El saneamiento
La Cuenca del Matanza-Riachuelo, llamado Riachuelo en su desembocadura y río Matanza en la mayor parte de su desarrollo, comprende parte de la ciudad de Buenos Aires y de los municipios de Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Esteban Echeverría, Almirante Brown, Presidente Perón, San Vicente, Cañuelas, Ezeiza, General Las Heras, Marcos Paz, Merlo y Morón.

Según datos oficiales, hasta el momento se concretó la limpieza de 214 basurales a cielo abierto, tarea que se complementa con la prevención para evitar la formación de nuevos focos y con medidas que buscan una mayor eficiencia en términos de recolección, transporte y transferencia de residuos sólidos por parte de los municipios involucrados.
Como parte de las tareas, Acumar lleva adelante un Plan Sanitario de Emergencia y para ello completó en el 2014 la implementación de 12 Unidades Sanitarias Ambientales que a lo largo del año realizaron 46 operativos en los que se brindaron más de 30 mil prestaciones. Los consultorios móviles se sumaron a los 15 centros de salud fijos abiertos a lo largo de la cuenca. En este marco también se realizaron actividades de prevención y promoción de la salud a la que asistieron 5.500 personas, según los datos apor tados por el organismo al juez Rodríguez, quien supervisa el cumplimiento del fallo de la Corte.
El Plan Integral de Saneamiento (PISA) elaborado por Acumar tiene entre sus prioridades la provisión de agua potable y servicio de cloacas a los habitantes de la cuenca y las cifras oficiales señalan que cerca de 7,2 millones de personas cuentan con agua potable y de ellas, 5,6 millones ya cuentan con cloacas en la cuenca baja y media. En tanto en la cuenca alta, la menos castigada por los efectos de la contaminación y donde el curso de agua presenta las características de un típico río de llanura, también se aseguró agua potable a 421 mil personas, en tanto que el servicio de cloacas alcanza a 280 mil habitantes.

Otra de las obras realizadas tiene que ver con la liberación del 78 por ciento del denominado camino de sirga, que es una forma simbólica de denominar a los 35 metros que se extienden a cada lado de las orillas del Riuachuelo y que abarcan una extensión de casi 40 mil metros. De ese total ya fueron pavimentados 31 mil metros, 4.200 se encuentran en proceso de pavimentación y en el resto se encuentra habitado u obstruido y requiere todavía de tareas de relocalización y limpieza.
Precisamente una de las tareas más importantes que lleva adelante la Acumar es el proceso de relocalización de las 17.771 familias que habitan los margenes o las inmediaciones del Riachuelo, para las cuales ya se construyeron un total de 2.633 viviendas y otras 4.447 se encuentran en ejecución, según las cifras oficiales del organismo. Otras 2.786 viviendas están proyectadas y para iniciar su construcción en tanto que 7.905 están en proceso de formulación.
En lo que respecta al control industrial, los datos oficiales hablan de que el 99,5 por ciento de los establecimientos de la cuenca ya fueron inspeccionados y del total, unos 1.254 fueron declarados contaminantes, algunos de los cuales ya readaptaron sus procesos de producción o están en vías de corregirlos.