Energía, intuición, magnetismo, convicción. El prototipo de este signo de Agua, regido por Marte y Plutón, tiene una presencia penetrante, ingresa, manda, no se olvida. Nada influenciable, el escorpiano sabe trazar sus rumbos sin intervención ajena, hace lo que quiere, sabiendo. La resistencia de este nativo es a prueba de fuego, espera, soporta, vuelve a esperar. Sutil y reservado, inteligente, muchas veces muestra su fuerza con su silencio. Su "Yo deseo" lo hace sexual, celoso, apasionado, único. Sus colores son el azul y el rosa a la vez. El escorpión cuando se enoja espera el momento para meter su coletazo letal, que puede hacerlo a través de una sola palabra. Psíquicos y potentes, los escorpianos magnetizan. Su alta fuerza de voluntad sumada su asombrosa capacidad de entereza los hace muy dueños de sí mismos e impenetrables. Defectos: destructivos, sarcásticos, algo crueles, muy celosos, posesivos más él que ella, bastante agresivo él no tanto ella, haciéndolos a ambos duros en sus conceptos e indeclinables. Virtudes: no falla a la confianza, tiene respeto por los secretos. Su mística íntima lo hace sostener sus valores. Este nativo renace y resurge cuantas veces el destino lo ponga a prueba. Poco fantasioso, este nativo enfrenta la adversidad sin temor. Cortés, tenaz, emotivo, gran personalidad que tiene que cuidar de no ser destructivo. Ave Fénix.