
La lucha por la recuperación
La llegada de Perón, el despertar democrático y el clamor por un río
A principios de 1973 Argentina se preparaba para finalizar 18 años de proscripción peronista, con la participación del Frejuli en elecciones y el posterior regreso al país de Juan Domingo Perón .

Testimonio de Pacheco Berhongaray.

Antonio "Pacheco" Berhongaray
Ex senador nacional por la UCRAlgunos decían que éramos los primeros piqueteros del país
Ese año se había promulgado el Decreto 15/60 del año 73 que establecía que las regalías del complejo hidroeléctrico Los Nihuiles también pertenecían a La Pampa en un 50%, ya que el cauce del río Atuel, utilizado para la represa, atraviesa ambos distritos. Pero ante el rechazo de Mendoza de aceptar el cumplimiento de la normativa, surgió en la provincia de La Pampa un reclamo popular que no sólo contempló la cuestión económica del momento, sino que fue el principio de una lucha por un despojo que llevaba décadas. “Teníamos que movilizar y defender porque sabíamos que éramos una cosa muy chiquita frente al poder que tenía Mendoza”, sostiene “Pacheco”, por lo que “la única fuerza era la movilización, la militancia, y tratar de dar a conocer el tema”.
En ese contexto de resistencia popular, en 1979, La Pampa demandó a Mendoza por primera vez en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que ocho años después falló estableciendo que el río es interprovincial, y que correspondía a las provincias realizar acuerdos para un aprovechamiento conjunto y equitativo de las aguas: “fue muy importante, el de la primera corte de la democracia, y vino a reafirmar lo que siempre se dijo en La Pampa”, destaca.
La lucha tuvo sus altibajos, sus silencios momentáneos y su militancia activa: y fue a partir de 2012, cuando surgieron las Asambleas en Defensa de los Ríos Pampeanos, que la causa volvió a tomar impulso en el pueblo pampeano, cuando se formaron agrupaciones en las localidades afectadas directamente por el corte del Atuel –Santa Isabel y Algarrobo del Águila-, pero también en Pico, Santa Rosa y otras localidades pampeanas.

Testimonio de Silvia Viglianco.

Fotogaleria de las asambleas de Santa Isabel y de Santa Rosa en defensa de los ríos pampeanos
Las acciones trascendieron el oeste pampeano y en la capital pampeana se realizó en marzo de este año el “Atuel Rock”, una jornada de concientización sobre la necesidad del río que debe correr por la provincia de La Pampa, así como una protesta en la Casa de Mendoza en la Capital Federal, en donde también hay pampeanos agrupados que militan por la misma causa.
Un pueblo sin memoria hídrica es un pueblo que puede llegar a volver a cometer errores en el futuro

Testimonio de Francisco Garmendia.
“Un pueblo sin memoria hídrica es un pueblo que puede llegar a volver a cometer errores en el futuro”, sostiene Garmendia, quien también forma parte del Partido Humanista de La Pampa, y afirma: “si bien estamos dando charlas en colegios pampeanos con el objetivo de recuperar la memoria hídrica, de tomar conciencia de lo que significa el agua que corre, el deseo de esta Asamblea es lograr instalar la problemática a nivel nacional”.