Experto en filtraciones, Julian Assange encontró una rendija y logró anoche llevar su voz al seno de las Naciones Unidas para pedir al gobierno de los Estados Unidos que cese con la persecución en su contra y a los de Suecia y Gran Bretaña que le den garantías de que no será extraditado al país norteamericano.

Refugiado desde junio en la Embajada de Ecuador en Londres, Assange participó mediante una videoconferencia en el foro "El Asilo Diplomático: fortaleciendo el sistema internacional de derechos humanos?, un evento repleto de asistentes celebrado ayer en Nueva York, en el marco de la 67ª Asamblea General de Naciones Unidas.

"El tiempo de las palabras se agotó, ahora es tiempo para la acción?, dijo el fundador de Wikileaks en una interpelación de forma directa al presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, quien durante su presentación apoyó los movimientos de la llamada primavera árabe.

Obama debería llevar "a la práctica sus palabras sobre la defensa de la libertad de expresión", agregó el ex hacker, y denunció que su propia caso como evidencia de que el jefe de la Casa Blanca "ha hecho más para criminalizar la libertad de expresión que cualquier otro presidente de Estados Unidos?.

Y apeló a la ironía para criticar al mandatario norteamericano por sostener un doble estándar. "Debe haber sido una sorpresa para los jóvenes egipcios que se lavaron los gases lacrimógenos estadounidenses de sus ojos haber escuchado que Estados Unidos apoya el cambio en Medio Oriente?, dijo.

Assange se encuentra desde el 19 de junio en la sede diplomática ecuatoriana en el Reino Unido con el objeto de evitar ser extraditado a Suecia, donde afronta una denuncia por presuntos delitos sexuales. Según declaró en distintas ocasiones, el australiano teme ser enviado a Estados Unidos ya que allí un Gran Jurado podría juzgarlo por difundir información secreta del Departamento de Estado.

Durante su intervención de ayer, el exhacker también denunció las "condiciones inhumanas?, el "confinamiento en solitario? y la "tortura psicológica? que ha sufrido en una prisión militar estadounidense el soldado Bradley Manning, quien habría filtrado documentación secreta a WikiLeaks está a la espera de juicio en Estados Unidos.