Skype (la principal plataforma de telefonía por IP) realizó una modificación en las políticas de seguridad de su servicios que le permitiría otorgar datos de los usuarios a las diferentes agencias de seguridad y bajar las barreras técnicas que impiden las intercepciones de conversaciones privadas.

Según denunció el sitio estadounidense Slate, un grupo de hackers descubrió que Skype -adquirida por Microsoft en mayo de 2011- hizo hace un par de meses una serie de cambios en su estructura de seguridad, lo que hace más vulnerable el video-chat y accesible a los mecanismos de espionaje.

A estas modificaciones técnicas se le suma una reformulación que hizo la compañía en algunos de los puntos de su política de seguridad en los que se deja en claro que ante cualquier tipo de pedido efectuado por un organismo judicial o de seguridad, la empresa puede suministrar datos de los usuarios.

En el punto N° 3 se indica: "Skype puede divulgar información personal para responder a exigencias legales, proteger nuestros derechos legales o defendernos de demandas judiciales, proteger los intereses de Skype, luchar contra el fraude y exigir el cumplimiento de las políticas de Skype o proteger los derechos, la propiedad o la seguridad de cualquier persona (?) Skype, el socio local de Skype o el operador o la empresa que facilitan la comunicación del usuario podrán suministrar información personal, contenido de comunicaciones o información de tráfico a una autoridad gubernamental, judicial u organismo de seguridad que solicite dicha información conforme a la ley. Skype proporcionará toda la colaboración e información razonables para responder a dicha solicitud?.

Una versión similar había circulado en mayo de 2011, cuando Microsoft autorizó el uso de tecnología plausible de "intervenciones legales? que permiten a los órganos del orden público interferir las conversaciones de los usuarios e interceptar el contenido que intercambian sin que aquellos lo sepan. En esa oportunidad, las autoridades de la empresa fundad por Bill Gates habían eludido responder si sobre la compañía de video-chat regían también dichos cambios.

En ese mismo mes, Microsoft compró a Skype por unos 8.500 millones de dólares, como parte de su estrategia para participar en el sector de las telecomunicaciones. En ese momento, la empresa adquirida contaba con unas 600 millones de cuentas registradas.

El servicio brindado por Skype es similar al que ofrecen las compañías de telefonía IP con la capacidad técnica de realizar chats y videollamadas gracias al tráfico de datos mediante una red distribuida peer-to-peer (P2P), en donde no hay servidores fijos. Desde sus comienzos, las conversaciones que circularon en Skype eran casi imposibles de interceptar gracias a diferentes mecanismos de cifrado y codificación.