El diseño y adecuación de los sistemas educativos nacionales en la era digital se ha transformado en una necesidad y en un enorme desafío de cara a la formación de las generaciones futuras. En la República Argentina no ha esquivado este desafío. Sin prisa, pero sin pausa, se lo ha encarado con decisión, valentía y perspectiva de futuro. Es decir, ante todo, se ha planificado una política pública que procura construir una Argentina más incluyente, justa, libre y soberana.
Conectar Igualdad es la política pública que la República Argentina diseñó e implementó para la incorporación de tecnologías digitales en sus sistemas educativos (a nivel nacional y provincial). Lejos de optar por enlatados que se ofertan a nivel mundial, Conectar Igualdad es una iniciativa bien Argentina, única e irrepetible. No encuentra precedentes a nivel nacional pero tampoco a nivel internacional. Es, simple y valientemente, un proyecto que hace camino al andar.
Desde el punto de vista técnico, Conectar Igualdad se basa en el modelo 1 a 1. Es decir, en la entrega de una computadora portátil por cada estudiante de las escuelas secundarias públicas, de educación especial y de institutos de formación docente de todo el país.
A su vez, cada uno de estos establecimientos públicos de nivel secundario tiene asignada una partida de portátiles para que los docentes las utilicen en el trabajo aúlico y en su propia capacitación.
Conectar Igualdad tiene objetivos amplios, diversos y ambiciosos. El programa busca introducir y fomentar el uso de las nuevas tecnologías digitales como herramientas de aprendizaje en todas las áreas curriculares (de acuerdo a las estrategias situadas de cada establecimiento). Sustentado en la idea del acceso universal e igualitario a las tecnologías digitales, en estos momentos se están entregando tres millones de portátiles y, en el futuro, se proyecta distribuir un millón más cada año.
Ahora bien, ¿Conectar Igualdad implica sólo el reparto de portátiles en el sistema educativo? No, afortunadamente, sus objetivos van mucho más allá y se basan en la inclusión social. El proyecto se enmarca dentro de la planificación y desarrollo de un modelo social de la Agenda Digital Argentina. Conectar Igualdad, junto a la Televisión Digital Abierta y Argentina Conectada (entre otros), es uno de los ambiciosos proyectos procuran alcanzar un nivel de "brecha digital 0" para el 2015.
El proyecto tiene varias particularidades a destacar. Una de ellas es que busca articular los sistemas educativos con las familias de los estudiantes y otros actores de la sociedad civil. A su vez, es uno de los proyectos que más favorece, desarrolla y "empuja? la industrialización del país. Si bien las primeras computadoras se importaron, muchos de estos dispositivos comienzan a producirse en el país. Para 2012 se proyecta una produción local de seis millones de dispositivos electrónicos.
También es destacable el tipo de gestión que se ha diseñado para el proyecto. En 2010 se desarrolló un portal (en constante movimiento y actualización) que, con más de 60.000 visitas diarias, ha logrado gestionar digitalmente el proyecto y alcanzar un alto nivel de despapelización. El portal ha sido clave para la gestión de empresas proveedoras, establecimientos educativos, docentes, alumnos y familias. El portal puede considerarse una clara iniciativa de gobierno abierto a los ciudadanos.
En pocos meses Conectar Igualdad se ha transformado en un proyecto modelo a nivel regional. Ha posicionado a la Argentina en el diseño de políticas públicas que incorporan tecnologías digitales a la educación y procuran mayores niveles de inclusión social. Lejos de significar las tecnologías digitales como una solución en sí misma, como una solución mágica, inició un camino de experimentación, innovación y adecuación para la resolucíon de problemas sociales.
Este es sólo el comienzo. ¿Prometedor? Sí, por supuesto. ¿Se puede mejorar? Sin dudas. Es muy necesario mejorar y profundizar el proyecto. La Argentina necesita más y mejor Conectar Igualdad.
* El Dr. Ariel Vercelli es Presidente de BIENES COMUNES A. C. e Investigador del CONICET / IEC-UNQ